La pérdida del gusto, conocida como disgeusia; y la pérdida del olfato, conocida como anosmia, se pueden suscitar por varias causas, y suelen ser signos de condiciones de salud, como la obesidad, la diabetes, la hipertensión o enfermedades del sistema nervioso como párkinson o alzhéimer, entre otras.
Source: elnuevodia.com